miércoles, 18 de junio de 2008

Al final apareció la luz

Y por algún lado tenía que explotar.
La presidenta anunció que iba a mandar al congreso el decreto de la las retenciones a las exportaciones para su tratamiento.
Hizo falta que varios caciques o Barones del PJ nacional (y sobre todo del conurbano bonaerense) mostraran los dientes para que El presidente del partido (néstor Kirchner) se diera cuenta que su poder es un suspiro prestado de un consenso, gestado a fuerza de caja y de votos. Un poder momentáneo al fin que durará lo que el matrimonio dure en el poder.
Fueron 98 días de conflicto que degastaron a la presidenta de una manera inimaginable, dejándola en estado de debilidad dificil de remontar. Ahora cada desición gubernamental será por demás observada.
Era más fácil sentarse con el sector agrario a discutir una política agropecuaria, que enfrentarse a un núcleo constitutivo del país. El agro no es Miguens ni los 5000 hacendados. El agro es el 80 % de la economía nacional. El enemigo era grande. pero la peor astilla es la del mismo palo. Así fue que Néstor el duro, socavó el poder de cristina la dialógica.
Kirchner se dio cuenta que esta parado en el filo de un cuchillo y la suerte de su presidencia pende de un hilo que el no logra asir.
Fueron cacerolas y peronistas los que dijeron basta y, quizás en una pelea marital, el rumbo fue cambiado a golpe de timón.
El enemigo pasó a ser Cecilia Pando (existe? tiene peso político?), una pobre miserable de ideas retrógradas que no es capaz de lograr más apoyos que los de unos pocos imbéciles.
En su discurso por cadena nacional Cristina fernández se refirió a los "estancieros" como los causantes de los males. Se olvidó de los otros millones de argentinos que no son estancieros.
Néstor Kirchner debío dar una conferencia de prensa (amañada es cierto, pero conferencia al fin), la primera en 5 años. Algo debe haber cambiado. Algo pasó dentro de la línea dura del gobierno para que eso pasara.
Acá perdió el gobierno porque no supo reaccionar a tiempo. Se peleó contra quién hace al país y terminó resignando la lucha por una cuestión interna. Ganó alguien? puede ser. La oposición política también perdió porque nunca supo apropiarse de la agenda pública y capitalizarla en su beneficio.
Lo cierto es que se abre una nueva etapa que debería pacificar y por más que la derrota se vista de victoria es derrota al fin. El gobierno ayer empezó a desprenderse de D´elia y algún otro impresentable intérprete de las voluntades presidenciales. Algo dolió y mucho.
la democracia se hace de estas cosas. es perfectible siempre

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